1) La nostalgia feliz

Amélie Nothomb

Editorial Anagrama (144 páginas)

Lo elijo porque...

Soy partícipe del leer porque sí, sin mandatos y por puro disfrute. Además, leer sin nación y sin fronteras, en la madrugada convirtiéndola en un amanecer de ojos abiertos. Es una relación cotidiana entre los lectores curiosos y los maestros apasionados que en el verano se mezcla con experiencias lejanas en un territorio casi olvidado: el ocio.

Fragmento de “La nostalgia feliz”

“Después de la entrevista, ya en el taxi que nos lleva al restaurante donde el editor ha reservado mesa, intento aclarar la cuestión con Corinne.

-Natsukashii designa la nostalgia feliz -responde ella-, el momento en que el recuerdo hermoso regresa a la memoria y la llena de dulzura. En cambio, su expresión y su voz expresaban pena, así que interpreté que se trataba de la nostalgia triste, que no es un concepto japonés.

A la pregunta de si la Magdalena de Proust es nostálgica o Natsukashii, se inclina por la segunda opción. Proust es un autor japonés.

En el restaurante somos cuatro (...)” .

2) La biblioteca de los libros rechazados

David Foenkinos

Editorial Alfaguara (296 páginas)

Lo elijo porque...

Lo imprevisto, incluso en los libros, nos parece casi insoportable. En ese punto, durante el tiempo sin clases y transmisiones se construye una historia de amor divergente que sale a buscarnos en forma de novela. Una editora se sienta en una mesa con un escritor y conjuran el amor por los libros. Todo lo demás está cifrado.

Fragmento del libro

“Se trata de una intriga amorosa bastante peculiar entre un bibliotecario y una joven de cuerpo espectacular. (...). Vida,  que así se llama la protagonista, cuenta que un hombre se mató al volante  por culpa suya; (...).

A decir verdad, la historia de Vida no interesa menos que la del bibliotecario. Pues en él reside la peculiaridad de esta novela. El protagonista trabaja en una biblioteca que acepta todos los libros que han rechazado las editoriales. Se puede uno encontrar allí, por ejemplo, con un hombre que ha acudido a dejar un manuscrito tras haber padecido cientos de rechazos.”.

3) Doña flor y sus dos maridos

Jorge Amado

Editorial Booket (480 páginas)

Lo elijo porque...

La mujer y su desnudez interpelan una y otra vez el amor, el desamor y sus desbordes. El libro explora la química del deseo a contrapelo; y la seducción de una escritura que se convierte en campo de batalla de los cuerpos y los fantasmas. Romance eterno de historias que acompañan la mirada, la risa, la invención y lo magnífico de una palabra escrita que siempre gana la partida.

Fragmento de “Doña Flor y sus dos maridos”

“La viuda abrió la puerta; ahora estaba seria, callada, sin sollozos, sin gemidos, fría y austera. Solita en el mundo. Los vecinos entraron, dispuestos a ayudar. Don Vivaldo, de la funeraria “Paraíso en Flor”, vino a entregar personalmente el cajón barato -hizo una rebaja notable recordando que había sido compañero de Vadinho en las mesas de ruleta y bacará, en las que él se jugaba ataúdes y lápidas- y colaboró con eficacia y experiencia para convertir al bohemio en un muerto presentable. Doña Flor asistió a todo sin pronunciar una palabra, sin una lágrima. Estaba solita en el mundo”.